Ayer el blog llegó a sus nueve meses de existencia. Una
gestación fructífera, llena de tropiezos y aprendizajes que me han permitido
descubrir un mundo que no era muy conocido para mí.
Estos meses me han ocupado en todos los sentidos. Trato de tener
al David y al joven del pueblo andino olvidado en constante concordancia pero
en ocasiones imprevistos de último
momento me hacen pisar la realidad.
Ya cercano al primer año de Suburbio de Letras Nocturnas
decidí hacer algunas modificaciones al blog y la temática que he estado
presentándoles y por la que ustedes me han conocido en este tiempo. ¿La razón?
Quiero unir mis pasiones y sacarle provecho a futuro en la intrincada carrera
profesional que desde niño divisé como meta: Ser Periodista.
La crónica con extractos de la realidad seguirá vigente, los
relatos también. Quisiera añadir a esta nueva etapa las entrevistas de
personalidad, noticias interpretadas y las curiosidades existentes en este
mundo tan cambiante.
Es por esa razón que volveré a las publicaciones seguidas
como era habitual tiempo atrás. Dividiendo la semana puedo sacarle provecho a
la situación.
Realicé algunos cambios al diseño del blog. Guardé en una
vitrina los premios otorgados por ustedes y dejé espacio para recomendaciones y
frases que animen nuestro extraño cerebro. Dividí en secciones las historias y
cambié algunas imágenes y colores. Si no es del agrado de ustedes pueden
hacérmelo saber. Me debo a ustedes no a mis extraños gustos.
Estaré tan cerca como lo estuve tiempo atrás. Vengo con
nuevas herramientas y los ánimos a millón. Los vientos de cambios han llegado y
no le temo a ello.
Les mando un abrazo a todos y espero que sus proyectos sigan
tomando vuelo.
Nos vemos tan pronto que ni te darás cuenta que me fui.
Un abrazo, David.
Comentarios
Publicar un comentario